Darle la bienvenida a un nuevo bebé en la familia es una de las experiencias más emocionantes de la vida. Pero no deja de ser una etapa desafiante...

Darle la bienvenida a un nuevo bebé en la familia es una de las experiencias más emocionantes de la vida. Pero no deja de ser una etapa desafiante, sobre todo para las madres primerizas. Muchas nuevas mamás luchan con la melancolía posparto y una de cada siete llega a sufrir depresión posparto. Por eso dedicaremos este espacio a dar algunos consejos de salud mental para las madres primerizas.

Consejos de salud mental para madres primerizas

Ser una nueva mamá podría ser difícil, pues podrías sentirte que estás bajo mucha presión y ansiedad. Sin embargo, con un poco de práctica estarás segura de tus habilidades como mamá. Y para ayudarte en el proceso, aquí hay algunos consejos que cualquier nueva mamá puede tomar para perseverar en su salud mental y felicidad.

Deshazte de las redes sociales los primeros días

Cuando acabas de tener a tu bebé, las redes sociales pueden representar un pequeño escape de socialización y una fuente de apoyo mientras amamantas al bebé. Pero sin que te des cuenta, tu bebé se habrá quedado dormido y tú seguirás desplazando hacia abajo para ver nuevas publicaciones.

En esta etapa de mamá primeriza, puedes desarrollar rápidamente dependencia a las redes sociales. Esto hará que no te esfuerces por tener interacciones reales y que a veces te quedes absorta en un dispositivo sin darte la oportunidad de disfrutar los pequeños momentos con tu bebé.

Todas las madres pasan por un período de aislamiento cuando dan a luz, pero es importante tener al menos una persona adulta con la que puedas interactuar de forma real.

Haz del sueño tu prioridad

Los bebés recién nacidos interrumpen el sueño de los padres. Y la falta de sueño puede intensificar las reacciones emocionales y hacernos sentir tristes o enojados con más facilidad. Encuentra apoyo en un amigo o familiar que pueda cuidar al bebé mientras tomas una siesta. Una estrategia que recomiendan los pediatras es dormir cuando el bebé duerme (y vaya que duermen en los primeros meses de vida).

Cambia tu lista de tareas pendientes

Las mamás primerizas se organizan mucho y crean listas precisamente por la falta de experiencia. Pero las tareas pendientes se convierten en estresores porque la falta de sueño, el tiempo limitado y otros factores impiden su cumplimiento.

Como nueva mamá, crees que podrás con todo, pero debes ir reconociendo tu ritmo y ver cuánto puedes hacer en un día sin estresarte ni agotarte. Cuando lo descubras, haz que tu lista sea más flexible y se adapte a tu realidad y personalidad. Estarás más satisfecha, segura y en paz.

Confía en tu intuición

Las madres son madres desde hace miles de años y a menudo la intuición es la mejor guía para saber qué hacer y cómo hacerlo. La intuición en las mamás es una fuerza poderosa para tomar decisiones, no tengas miedo.

No trates de suprimir tus sentimientos de preocupación automáticamente, porque pueden estarte dando información valiosa. Por supuesto, este consejo no trata de confiar en tu intuición por encima del criterio médico, sino de valorar tu propio conocimiento de tu bebé y tu propia experiencia como mamá.

Sé amable contigo misma

No te compares con otras mamás ni en tu estilo de crianza, ni en la forma como el cuerpo de ellas reaccionó después del parto y tampoco en las emociones que ellas dicen sentir hacia sus hijos. Gran parte de lo que las mamás expresan en las redes sociales o en la sociedad en general está filtrado y puede no ser realista.

Debes tomarte tu tiempo para adaptarte a la vida con tu nuevo bebé y todos los cambios importantes relacionados con el estilo de vida.

Y así como no debes compararte a ti misma con otras mamás, tampoco debes comparar a tu bebé con otros bebés. Cada bebé es totalmente único, así que no intentes replicar los hitos de los bebés de otras madres con el tuyo y déjale desarrollarse a su propio ritmo.

Aprecia tu cuerpo (y todo lo que ha pasado)

Tu cuerpo acaba de pasar por un proceso de cambios como ningún otro. Hay demasiada información que todavía no se ha asimilado. No compares tu cuerpo con tu figura previa a la concepción, porque aumentarás los sentimientos de insatisfacción. En su lugar, practica la gratitud.

La gratitud tiene enormes beneficios para la salud mental y centrada en el cuerpo puede ayudar en gran medida a hacer las paces y recuperarse más rápida y sanamente.

Deja en tu tiempo agenda para hacer “nada”

Mientras te adaptas a tu nuevo bebé, deja tiempo en el día para no ser productiva. Con un bebé recién nacido las cosas suceden demasiado rápido, por eso las mamás primerizas a menudo caen en shock y no disfrutan ciertos aspectos de la etapa.

Por eso es muy útil no sobre-programar el día y ralentizar un poco las cosas dejando tiempo disponible para hacer absolutamente nada y disfrutar tiempo a solas con el bebé.

Si estás entrando a la maravillosa etapa de la maternidad y requieres algunos consejos y recursos adicionales, un experto en salud mental y satisfacción emocional, puede ayudarte. Ponte en contacto.

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